Greenpeace pide a Gustavo Sáenz que frene la construcción de un country sobre una selva protegida en San Lorenzo.

Solo entre marzo y agosto de este año se deforestaron más de nueve mil hectáreas de bosques nativos en la provincia.

Greenpeace le pide al gobierno de Gustavo Sáenz que frene la habilitación para la construcción de un country sobre una selva protegida en San Lorenzo.

Denunciaron que avanza un negocio inmobiliario sobre una de las pocas áreas de Selva de Yungas que quedan en Argentina, en la localidad de San Lorenzo. Se trata del proyecto urbanístico Los Maitines S.A., de la familia Patrón Costas, que afectará 125 hectáreas. La ecorregión de Yungas ocupa menos del 1% del territorio argentino, pero concentra casi el 50% de la biodiversidad.

“Estas cuestiones son aún más graves cuando el mismo Estado es el que otorga los permisos para, en este caso, los negocios inmobiliarios”, expresaron. Semanas atrás desde la institución le enviaron una carta a Sáenz pidiendo que cese la construcción y declare la emergencia forestal, sin embargo nunca obtuvieron una respuesta.

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