La apuesta de Juan Schiaretti y Juan Manuel Urtubey por atraer a gobernadores
El armado de la flamante alianza “antigrieta” del peronismo opositor
El mandatario de Córdoba y el exgobernador de Salta aspiran a seducir a las autoridades provinciales desencantadas con el Frente de Todos. El lavagnismo será la pata bonaerense del nuevo espacio electoral. El radical Facundo Manes por ahora descarta sumarse al nuevo frente.
El gobernador cordobés, Juan Schiaretti, y el exmandatario salteño Juan Manuel Urtubey no ocultan su optimismo por el acuerdo electoral “por fuera de la grieta” que acaban de sellar. Cerca de ambos consideran que la construcción de una nueva fuerza política podría sumar a gobernadores peronistas desencantados con las perspectivas electorales del Frente de Todos para este año –ya sin Cristina Fernández de Kirchner como candidata— y dispuestos a pegar el salto hacia este nuevo proyecto que se define como “Federal”.
“Esto no es incipiente”, advierten. La afirmación tiene dos ejes de un “largo trabajo” político. Primero, plantean, la relación que mantiene Schiaretti con el resto de los gobernadores de la zona núcleo del país, con Santa Fe y Entre Ríos. La segunda es la expresión parlamentaria del Interbloque Federal, que incluye a peronistas “cordobesistas”, el lavagnismo bonaerense y socialistas. Pese a algunas versiones, lo que sí quedaría casi descartado es la posibilidad de sumar al radical antigrieta Facundo Manes, ya que el neurólogo tiene previsto lanzar su precandidatura presidencial dentro de Juntos por el Cambio, tras su regreso de las vacaciones.
“Lo del martes fue un hito. Seguramente habrá novedades en las próximas semanas”, afirmaron a Página/12 cerca de Schiaretti. Aunque nadie lo dice abiertamente, promueven el éxodo de gobernadores peronistas desde el FdT hacia la nueva construcción política-electoral con el objetivo de “superar la grieta” entre el oficialismo y JxC, y de competir este año por llegar a la Casa Rosada. “No será una catarata”, reconocen. Tampoco lo consideran un trasvasamiento partidario, sino que -apuestan- habría “decisiones personales de dirigentes” de pegar el salto. Pero también dejan abierta la puerta a sectores partidarios.
El análisis de los promotores del acuerdo se apoya en las dificultades que afronta el FdT para las elecciones presidenciales ya sin CFK como candidata. “Muchos buscarán cercar sus propios territorios ante una posible derrota nacional”, sostienen los cordobesistas ante este diario cuando se los consulta sobre cuáles serían los gobernadores que podrían pegar el salto al nuevo proyecto.
“La primera foto de Alberto Fernández con los gobernadores por el tema de la coparticipación no es la misma que la segunda foto, cuando firman el pedido de juicio político a la Corte. En la segunda hay muchas ausencias”, argumentan. Esa lista incluye por ahora al santafesino Omar Perotti (ausente en ambas reuniones); el entrerriano Gustavo Bordet (que participó de las reuniones pero no rubricó el pedido de juicio político a los supremos) y al sanjuanino Sergio Uñac (mismo caso que Bordet).
En el entorno de Schiaretti le adjudican al gobernador el rol de articulador de un proyecto de “tercera posición” entre el FdT y JxC. Sostienen que el cordobés acrecentó la “excelente relación” entre los gobernadores de la zona núcleo del país, que “comenzó José Manuel De la Sota con los peronistas (Sergio) Urribarri y (Jorge) Obeid; y que también incluyó a los gobiernos del socialismo santafesino”. Los vínculos que tejió Schiaretti con Perotti y Bordet —afirman— podrían acercarlos al nuevo proyecto. Los tres carecen de posibilidades de reelección en sus provincias, pero pretenden alambrar sus territorios y el poder.
La alianza provincial Hacemos por Córdoba que construyó Schiaretti también incluye a socialistas y hasta el GEN de Margarita Stolbizer (incluso fueron aliados a nivel nacional). Un punto en contra es que al peronismo cordobesista le sería muy difícil reunir en un mismo frente nacional a Perotti y el PS, que se enfrentarán en Santa Fe.
La articulación
El otro sostén del nuevo espacio electoral es la articulación parlamentaria. El Interbloque Federal, que en la Cámara de Diputados nuclea al cordobesismo de Schiaretti, el lavagnismo de Identidad Bonaerense y los socialistas santafesinos.
“Nunca nos fuimos de ahí”, afirmó a Página/12, Graciela Camaño en referencia al espacio que en algún momento se llamó Alternativa Federal. Camaño ya empezó a recorrer la provincia de Buenos Aires junto a Urtubey para postularse como candidata a gobernadora. Aunque prefiere no autodefinirse como lavagnista, Camaño reconoce que Roberto Lavagna también adhiere al mismo espacio. El encargado de las relaciones con Schiaretti es el diputado Alejandro “Topo” Rodríguez, que preside el interbloque. Ambos conformarían la pata bonaerense del nuevo espacio electoral.
Quien quedaría afuera de esta propuesta electoral sería Facundo Manes, a pesar de todas las especulaciones que se tejieron sobre la posible participación del radical. “Es cierto que Manes es un dirigente que siempre se presentó como representante de la antigrieta, que incluso se reunió con Schiaretti en Córdoba. Pero no existe ningún otro vínculo ni propuesta con este nuevo espacio electoral”, dijo a este diario un colaborar directo del neurólogo. “Facundo está de vacaciones con su familia, hoy es su cumpleaños. Incluso tiene previsto, tras las vacaciones, lanzar su candidatura dentro de Juntos por el Cambio”, ratificaron desde su entorno. La confirmación de que Manes no sacará los pies del plato, al menos por ahora.
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