Total de visitas

salta noticias salta

noticias de salta

El oficio de curar con plantas: cuando la medicina no viene en pastillas

Una asociación de hierbateras en Quito trabaja para perpetuar las enseñanzas de la medicina andina. Durante la pandemia, sus conocimientos significaron una importante fuente de sanación complementaria, aunque siguen teniendo resistencia en algunos sectores

María Sandra Vinocunga (46) en su puesto de venta de plantas medicinales. Resalta en la imagen las flores amarillas llamadas Caléndulas de baño o flor de muerto.

El ambiente en la plataforma carga un aroma dulce a hierbaluisa y lavanda, y en un altoparlante suena, discretamente, música rockolera. Hay unos 30 locales entre puestos de venta de papas y hortalizas y unos cuantos quioscos de comidas populares, pero la mayor actividad se concentra en los 50 puestos de plantas medicinales. Las hierbateras provienen de comunas ancestrales y parroquias rurales de Quito. Lo que ofrecen es fruto de la recolección, de cosechas en sus propias huertas, y de compras que hacen a otras productoras o que los mismos días de feria intercambian entre ellas para tener suficiente variedad.


Plantas: Amapola (roja) regula la menstruación. Flor de Pensamiento (violeta) para dolores y coágulos del corazón, para estrés y nervios. ñagcha (amarilla) para la bilis.

El ritmo acelerado del comercio avanzará hasta las seis de la mañana, cuando muchas vendedoras harán una pausa para desayunar. En las horas siguientes, hasta el mediodía, llegarán los clientes que compran al por menor, y entre ellos quienes buscan consejos de sanación. Mala digestión: orégano, malva olorosa, eneldo. Vías urinarias: mashua, casamarucha, llantén. Circulación de la sangre: ortiga.

 “La enfermedad hizo que la gente volviera a la raíz, a nuestra medicina natural”

About Author